El momento de las despedidas
Es curioso como trabajar con personitas, cada uno con su familia correspondiente. Cuando eres una "seño", estas personitas y sus familias te dan buenas y malas noticias en el mismo curso, mes, semana o incluso en el mismo día.
En mi colegio solemos tener el sistema de tutorizar a los mismos niños dos años (el ciclo completo). Creo que es positivo para los alumnos, ya que llegas a conocerlos mejor y se puede sacar mucho más de ellos.
También tiene cosas "negativas". Les coges demasiado cariño.
Llega el momento de las despedidas. Es curiosísimo cómo te despides de los niños. Como si no los fueras a volver a ver. La mayoría seguirán en el colegio. Los veré pasear por los pasillos, los veré crecer y a algunos, incluso, ya les he visto graduarse e incluso con algunos he coincidido de copas (cosa que me hace pensar en mi edad...). Me encanta verlos hacerse mayores, la verdad.
Y a estas alturas de curso aparecen las familias dando esas malas noticias que me ponen realmente triste. Se van del cole por circunstancias diferentes: algunas son noticias tristes y otras alegres, pero siempre con sabor amargo. Sobre todo cuando en estos dos años se han creado vínculos con los niños y con las familias. Ese "feeling" que uno siente, que es mágico y que no es intencionado. Aparece sin avisar.
Hoy he llorado junto a una madre de un tutorando. He llorado a su lado y quiero que sepa que seguiré riendo y llorando junto a ella siempre que me necesite.